La Inflación se desacelera, impulsado por una reducción en productos clave como el transporte aéreo y el jitomate.
México ha registrado una importante desaceleración en su inflación, alcanzando en enero de 2025 una tasa anual de 3.59%. Este es el nivel más bajo desde enero de 2021 y refleja un cambio positivo en la economía del país, de acuerdo con los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI). El Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) reportó una variación mensual de 0.29% en enero, la tasa más baja para ese mes desde 2019.
La noticia ha sorprendido a los analistas económicos, que esperaban una tasa anual de inflación de 3.7%, según una encuesta realizada por Banamex. Este comportamiento marca una tendencia a la baja por tercer mes consecutivo, lo que indica una moderación en el ritmo de aumento de los precios tras varios meses de fuertes presiones inflacionarias.
La inflación anual de México bajó a 3.59 por ciento en enero, de acuerdo con datos del Inegi. Esto habla de la fortaleza de la economía mexicana e impulsa la inversión en nuestro país. La honestidad y la transformación dan resultados. pic.twitter.com/osgmFGkTyA
— Claudia Sheinbaum Pardo (@Claudiashein) February 7, 2025
Causas de la baja en la inflación: productos clave
Entre los factores que han influido en la baja inflación en México destacan algunos productos que experimentaron fuertes caídas en sus precios. Por ejemplo, el transporte aéreo registró una disminución de 38.6% en enero, lo que contribuyó significativamente a la desaceleración general de los precios. Otros productos que vieron descensos importantes fueron la papaya, con una reducción del 16.5%, y el jitomate, cuyo precio bajó un 15.5%. Estos productos, que habitualmente son parte de la canasta básica de los consumidores, tuvieron un impacto considerable en la reducción de la inflación.
Sin embargo, no todos los productos mostraron una tendencia a la baja. El componente subyacente de la inflación, que refleja la tendencia más persistente en el tiempo, presentó un aumento leve, pasando de 3.65% en diciembre a 3.66% en enero. Aunque este incremento es mínimo, resalta la necesidad de un monitoreo constante sobre las presiones inflacionarias que podrían persistir en el mediano y largo plazo.
La política monetaria del Banco de México sigue su curso
La desaceleración de la inflación se da en un contexto donde el Banco de México ha mantenido una política monetaria restrictiva, con una tasa de interés de referencia ubicada en 9.50% desde su última rebaja, la quinta consecutiva. La decisión del Banco de México refleja un intento por controlar las presiones inflacionarias, aunque expertos como Gabriela Siller, directora de análisis económico de Grupo Base, advierten que existen riesgos de que la inflación pueda repuntar durante 2025.
“La decisión refleja un ajuste acorde con la moderación de las presiones inflacionarias, pero persisten riesgos al alza para la inflación a lo largo del año”, señaló Siller, sugiriendo que la lucha contra la inflación aún no está ganada completamente.
En México 🇲🇽 la inflación se desaceleró en enero al ubicarse en una tasa anual de 3.59%.
— Gabriela Siller Pagaza (@GabySillerP) February 7, 2025
Desafíos futuros: ¿Qué sigue para la inflación en México?
Aunque la tendencia actual es positiva, expertos coinciden en que los retos no han desaparecido. La inflación subyacente y los productos que todavía muestran incrementos en sus precios podrían seguir siendo un factor determinante en los próximos meses. Además, la política monetaria del Banco de México deberá seguir de cerca las fluctuaciones de los precios internacionales, así como las expectativas de crecimiento económico, para garantizar que la inflación continúe bajo control.
Por lo pronto, el dato de enero es una buena noticia para los consumidores mexicanos, que podrían ver un alivio en su poder adquisitivo si la inflación sigue mostrando signos de moderación. Sin embargo, la incertidumbre persiste y las autoridades deben seguir tomando medidas para garantizar la estabilidad económica del país.
Un respiro para la economía mexicana
La baja en la inflación registrada en enero es una señal de optimismo para la economía mexicana, pero también un recordatorio de que los desafíos económicos continúan. Con un descenso notable en productos clave y una política monetaria vigilante, México parece estar encaminado a una estabilización, aunque aún será necesario un esfuerzo continuo para mantener la inflación bajo control a lo largo del año.
