La Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) descendió al lugar 136 en la edición 2026 del QS World University Rankings, abandonando así el grupo de las 100 mejores universidades a nivel global. Esta caída representa una baja de 42 posiciones respecto al ranking anterior, donde se había ubicado en el puesto 94.
Una baja impulsada por retos en investigación y presencia internacional
Aunque la UNAM mantiene una destacada reputación académica, con una calificación de 99.2 sobre 100, otros indicadores clave provocaron su descenso. Entre los factores que más impactaron se encuentran la disminución en el número de citas por facultad, un indicador que refleja la producción científica, así como la baja atracción de profesorado y alumnado internacional.
El ranking QS evalúa a más de 1,500 instituciones de educación superior en todo el mundo, considerando aspectos como reputación académica, empleabilidad, producción de investigación y perfil internacional.

Con esta caída, ninguna institución mexicana figura entre las 100 mejores del mundo en el ranking QS 2026. El Tecnológico de Monterrey, que también formaba parte del grupo destacado en años anteriores, ahora se ubica en el puesto 187.
En el contexto latinoamericano, la UNAM ocupa la cuarta posición. Las universidades mejor posicionadas en la región son la Universidad de Buenos Aires (84), la Universidad de São Paulo (108) y la Pontificia Universidad Católica de Chile (116).
UNAM: un referente en América Latina
A pesar del descenso, la UNAM sigue liderando en el ámbito nacional y mantiene una presencia importante en rankings especializados. En la evaluación interdisciplinaria del Times Higher Education 2025, la universidad ocupa el lugar 54 en ciencias interdisciplinarias, lo que resalta su relevancia en áreas específicas de investigación.
La salida de la UNAM del top 100 pone de relieve los desafíos que enfrentan las universidades latinoamericanas para competir en el escenario global. Entre ellos destacan la necesidad de fortalecer la internacionalización, aumentar la inversión en investigación y mejorar la visibilidad académica.










