Durante la conferencia matutina del 26 de junio de, el Gobierno de México dio a conocer la implementación de la primera fase de los Polos de Desarrollo Económico para el Bienestar. Esta estrategia comprende 15 polos ubicados en 14 entidades federativas, diseñados para fomentar la inversión, la industrialización regional y la generación de empleos formales.
Con esta medida, las autoridades estiman la creación de al menos 300 mil empleos directos en los próximos años, además de un incremento estimado del 1.5 % en el Producto Interno Bruto (PIB) nacional.
Ubicaciones estratégicas y sectores prioritarios en Polos de Bienestar
Los primeros 15 polos estarán distribuidos en Campeche, Chihuahua, Durango, Estado de México, Guanajuato, Hidalgo, Michoacán, Puebla, Quintana Roo, Sinaloa, Sonora, Tamaulipas, Tlaxcala y Veracruz. Estas regiones fueron seleccionadas por su conectividad, disponibilidad de infraestructura logística y capacidad técnica para el desarrollo de clústeres industriales.
Cada polo priorizará sectores como la agroindustria, automotriz, electromovilidad, dispositivos médicos, aeroespacial, energía, química, textil, calzado, semiconductores, logística y economía circular.
Trámites simplificados y licitaciones inmediatas
Con el objetivo de facilitar la instalación de empresas, el Gobierno de México anunció la implementación de la política de “cero trámites”. Esta iniciativa busca reducir al mínimo los procesos administrativos a nivel federal, estatal y municipal. Los primeros procesos de licitación se llevarán a cabo en agosto de 2025.
Además, los gobiernos estatales firmaron convenios de colaboración que permitirán lanzar licitaciones locales, con la finalidad de adjudicar predios y definir a los operadores que coordinarán los desarrollos industriales.
Los polos contarán con diversos estímulos fiscales para las empresas interesadas en establecerse en estas zonas. Entre los beneficios destacan la deducción del 100 % en activos fijos nuevos, así como el 25 % en gastos de capacitación laboral y el 25 % en inversión en investigación y desarrollo.
Asimismo, se contempla infraestructura integral que incluye acceso a energía, transporte ferroviario, puertos secos, servicios de última milla y zonas de aduanas. Cada polo ha sido diseñado con criterios de sustentabilidad ambiental y optimización territorial.
Las licitaciones para las primeras inversiones iniciarán en agosto, marcando el arranque formal de una etapa clave para el fortalecimiento económico regional.
