Ante las críticas del EZLN sobre la violencia, la presidenta de México subraya que su gobierno mantendrá una postura de respeto.
A 30 años del levantamiento del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN), la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, respondió a las declaraciones emitidas por este grupo durante las jornadas conmemorativas, en las que se destacó el aumento de la violencia en Chiapas y su crítica a la división de los movimientos con los programas gubernamentales como «Sembrando Vida». En su conferencia matutina en Palacio Nacional, Sheinbaum reiteró que su administración tendrá una postura de respeto hacia el EZLN, pero también se comprometerá a defender su proyecto de gobierno.
El EZLN, liderado por el subcomandante Galeano, se ha mostrado crítico de algunas de las políticas del gobierno federal, especialmente en lo que concierne al impacto de la violencia del crimen organizado en Chiapas y la supuesta contradicción entre los programas de bienestar, como «Sembrando Vida», y las demandas del movimiento indígena zapatista. En sus recientes mensajes, el EZLN ha advertido sobre el incremento de la violencia en las comunidades chiapanecas, acusando que el poder del narcotráfico ha aumentado en la región y que las políticas federales no han tenido el impacto esperado.
La postura de Claudia Sheinbaum
En su respuesta, Claudia Sheinbaum subrayó que México es un país democrático y que, aunque se respetan las opiniones del EZLN, el gobierno federal está comprometido con la paz, la justicia y el bienestar de todos los mexicanos, especialmente en Chiapas, donde se han implementado diversos programas sociales con el fin de mejorar las condiciones de vida de las comunidades más marginadas.
La mandataria enfatizó que el gobierno de la Cuarta Transformación, bajo la dirección del presidente Andrés Manuel López Obrador, está enfocado en avanzar con sus principios de justicia social y la erradicación de la pobreza, lo que incluye el impulso de proyectos como Sembrando Vida, cuyo objetivo es ofrecer alternativas económicas a las comunidades rurales mediante la reforestación y la agricultura sustentable.
Reafirmación de principios
Sheinbaum resaltó que a pesar de las diferencias, el respeto mutuo será la base de cualquier diálogo, pero que su administración seguirá defendiendo las iniciativas que considera necesarias para la transformación del país. Asimismo, hizo hincapié en que la paz y la justicia son las principales prioridades del gobierno mexicano, y no habrá marcha atrás en el esfuerzo por garantizar estos valores para todas las regiones, incluyendo Chiapas, que históricamente ha sido un territorio clave en el movimiento zapatista.
El futuro del diálogo con el EZLN
A lo largo de las tres décadas desde el levantamiento del EZLN, los zapatistas han mantenido su lucha por la autonomía de los pueblos indígenas y la justicia social en México. Aunque el gobierno de López Obrador ha implementado políticas dirigidas a mejorar las condiciones de vida en las comunidades chiapanecas, las diferencias entre el gobierno y el EZLN persisten, especialmente respecto a la forma en que se deben abordar las demandas de los pueblos originarios y la violencia generada por el crimen organizado en la región.
A pesar de las tensiones, tanto el EZLN como el gobierno de la Cuarta Transformación han reiterado la importancia de mantener un diálogo respetuoso para avanzar en la resolución de los problemas que enfrenta el país. Las próximas semanas podrían ser claves para determinar si se abren nuevas vías de comunicación y colaboración entre ambas partes.
Un respeto mutuo y el compromiso por la justicia
El aniversario número 30 del levantamiento zapatista ha puesto de nuevo en la mesa los desafíos que enfrenta México en términos de violencia, pobreza y derechos de los pueblos indígenas. La presidenta Claudia Sheinbaum, al igual que el presidente López Obrador, ha reafirmado que su gobierno está comprometido con la transformación social, pero también con el respeto a las luchas históricas del EZLN. La relación entre ambos será sin duda clave para el futuro de las políticas sociales en el sur del país y para el bienestar de las comunidades más vulnerables.
