- El expresidente de Honduras, Juan Orlando Hernandez, fue extraditado este jueves a Estados Unidos, en donde enfrentará un juicio por supuesto narcotráfico y posesión de armas
- Juan Hernández, está acusado de tres cargos que habrían sido cometidos desde 2004 a 2022
El expresidente de Honduras, Juan Orlando Hernandez, fue extraditado este jueves a Estados Unidos, en donde enfrentará un juicio por supuesto narcotráfico y posesión de armas.
El traslado del mandatario estuvo a cargo de la Agencia para el Control de Drogas (DEA) del país norteamericano.
Los hechos sucedieron luego de que su hermano, Juan Antonio, fuera sentenciado en un juzgado de Nueva York por cargos similares el pasado 2021.
El expresidente Hernández, fue entregado a las autoridades de Estados Unidos, en la Base Aérea Hernán Acosta Mejía, ubicada en Tegucigalpa, a la que fue llevado en un helicóptero de la Fuerza Aérea de Honduras, por el ministro de Seguridad, Ramón Sabillón.
El fiscal general de Estados Unidos, Merrick Garland, señaló:
«Hernández abusó su posición como presidente de Honduras para operar el país como un narcoestado».
Damian Williams, fiscal jefe del Distrito Sur de Nueva York dijo:
«Los cargos que anunciamos hoy buscan responsabilizar a Juan Orlando Hernández por años de corrupción, años de violencia y años de narcotráfico»
La justicia estadounidense acusa a Hernández de tres cargos que habrían sido cometidos desde 2004 a 2022. Uno es por «conspiración para importar una sustancia controlada a los Estados Unidos«, con el «conocimiento de que dicha sustancia sería importada ilegalmente a Estados Unidos«.
Además, se le acusa de «fabricar, distribuir y poseer con la intención de distribuir una sustancia controlada a bordo de una aeronave registrada en los Estados Unidos«. Otro cargo es por «usar o portar armas de fuego, o ayudar e instigar al uso, el poder y la posesión» de «ametralladoras y dispositivos destructivos».
El expresidente también está acusado de aceptar millones de dólares en sobornos para proteger a narcotraficantes de las investigaciones judiciales.
Su caso es un hecho inédito en la historia de Honduras.