Desde el inicio de la incursión rusa en Ucrania, han circulado en redes numerosos videos y fotos sacados de contexto, declaraciones de las que no hay registro e información falsa sobre el conflicto bélico.
Analizamos las fake news en redes sociales y esto fue lo que paso:
Imágenes circularon en redes sociales donde senadores mexicanos del PAN exigen a AMLO enviar armas a Ucrania.
La carta entregada por los legisladores fue enviada por parlamentarios ucranianos y el PAN negó haber hecho la solicitud
Miles de usuarios se cuestionaron si la guerra en Ucrania afectaria el precio del aceite de girasol en España.
Como argumento, difundieron la etiqueta de una botella con una dirección de Sevilla, pero eso no prueba que la materia prima sea de origen sevillano.
¿Un canal de TV en Italia usó un fragmento de la película “Impacto Profundo” para informar sobre la guerra en Ucrania?
No existe registro de ello y la cadena lo negó.
¿El presidente de Ucrania publicó en marzo un video en el que aparece con una militar fallecida en enero como si fuera actual?
No, la mujer no es Inna Derusova, como aseguran miles de usuarios, sino Tatiana Ostashchenk.
¿El exboxeador Vladimir Klitschko subastó su medalla de oro a favor de los niños de Ucrania?
La venta tuvo lugar en 2012, no fue parte de las iniciativas del excampeón a favor del pueblo ucraniano en 2022
¿Un tanque ruso capturado en Ucrania está a la venta en eBay?
No. Las imágenes en los supuestos anuncios son anteriores a la incursión rusa y la empresa no permite la venta de armas en su portal.
En redes sociales circula una supuesta foto de «El fantasma de Kiev», un piloto que habría derribado múltiples aviones de combate rusos desde el inicio de la guerra en Ucrania.
Pero la imagen muestra a un reportero ucraniano y fue tomada en 2019.
¿Pero cómo saber si el video o las imágenes que te llegan a través de Facebook, Instagram o WhatsApp sobre Ucrania son reales o no?
Para que no caigas en fake news te recomendamos fijarte en la calidad de la imagen, prestar atención a los detalles, consultar fuentes confiables y no dejarte llevar por las emociones.
Tómate un minuto y analiza. No te creas la noticia ni compartas el texto de inmediato.